Cómo crear una auténtica Smart Home (I)
Contrariamente a lo que mucha gente piensa, para lograr que tu casa se convierta en una Smart Home, no basta con llenarla de dispositivos inteligentes, conectarlos a la red WiFI y manejarlos desde tu celular. Y tampoco es algo que se haga de la noche a la mañana.
Una casa inteligente es aquella que está asentada sobre un proyecto domótico, por pequeño que este sea, en donde primero debes tener claro qué es lo quieres conseguir con esta tecnología.
Si vives en un pequeño departamento, tal vez solo quieras incorporar unos focos inteligentes, con el fin de crear diversos ambientes luminosos, para generar la sensación de más recámaras o espacios.
Pero si tienes una casa con un extenso jardín, o un patio, sería más lógico idear una extensa red domótica que abarque varios centenares de metros, en donde tendrían cabida toda clase de dispositivos con diferentes funciones: seguridad, climatización, riego…
En este primer artículo te vamos a enseñar cómo empezar una Smart Home desde cero y cuáles son las mejores herramientas para lograrlo.
Si quieres también conocer otras opciones más avanzadas para la automatización de casas, te invitamos a la lectura de la segunda parte de este exhaustivo artículo sobre domótica.
Domótica: ¿qué es y para qué sirve?
La domótica es el conjunto de sistemas informáticos y dispositivos instalados en el hogar, que permiten automatizar acciones domésticas, con el fin de mejorar la calidad de vida de sus ocupantes.
Los primeros sistemas para la automatización de inmuebles fueron implementados en edificios de oficinas y estaban dirigidos a aumentar la productividad, mejorar la seguridad y optimizar el gasto de energía.
En aquel entonces, la única manera de controlar todos los elementos era mediante una extensa red cableada, que los conectaba a una centralita.
La revolución en el ámbito de la domótica surge con el IoT (Internet of Things) rama evolutiva de la red global, cuya aplicación está enfocada en el ámbito doméstico y en donde se busca la interconexión digital de objetos de uso cotidiano.
Gracias al desarrollo de los distintos protocolos de comunicación inalámbrica, a la aparición de diferentes plataformas para la implementación de sistemas domóticos basados en la nube y a la proliferación de dispositivos inteligentes de todo tipo, la idea de tener una casa inteligente es, a día de hoy, un sueño perfectamente alcanzable para la mayoría de los bolsillos.
¿Qué necesitas para comenzar tu Smart Home?
1.- Conexión a internet
Del mismo modo que cualquier vivienda se levanta a partir de unos cimientos, las casas inteligentes se empiezan a «construir» tecnológicamente, sobre una conexión a internet.
Sin internet nunca conseguirás que tus dispositivos, asistentes y software se comuniquen contigo o entre sí.
Si bien es cierto que podrías controlar mediante Bluetooth algunos de tus dispositivos inteligentes, como cerraduras digitales WiFi, el corto alcance de esta conexión inalámbrica es un obstáculo a la hora de hacer crecer tu red domótica.
Por lo que las alternativas más habituales a la hora de conectar tus dispositivos a internet serían utilizando directamente la señal WiFi del router, o a través de un hub domótico.
Red WiFi para dispositivos inteligentes
Por sencillez y disponibilidad, es la primera opción que debes considerar, debido a que la mayoría de los hogares disponen de conexión a internet y un router inalámbrico con antena WiFi.
Para hacer funcionar de forma remota a dispositivos inteligentes, solo tienes que enlazarlos con tu red WiFi, y ya podrás controlarlos a distancia desde tu smartphone.
Si vives en un departamento, la red WiFi es la elección más lógica, dado que la cobertura que ofrece esta señal inalámbrica es más que suficiente para que todos tus dispositivos instalados dentro de este tipo de vivienda estén dentro del rango de cobertura.
Pero si se trata de una propiedad grande, con una casa de varias alturas y un área exterior, es inevitable que algunos de tus dispositivos queden demasiado alejados del rango de la señal WiFi.
Si un dispositivo de domótica recibe una señal WiFi débil, no responderá a los comandos de forma regular ni inmediata y su funcionamiento no será el deseado.
El déficit de cobertura lo puedes solucionar mediante la instalación de repetidores WiFi. Estos dispositivos repiten la señal original, llevándola a lugares donde esta no alcanza.
Sin embargo, utilizar la red WiFi para dispositivos inteligentes en tu Smart Home tiene otros inconvenientes.
A medida que vayas conectando más dispositivos inteligentes a la red WiFi, tu router comenzará a saturarse. Esta acumulación de conexiones provocará que algunos de los elementos domóticos no respondan en el momento. O incluso que lleguen a desconectarse de la red.
Además, los dispositivos domóticos, debido a su función básica, no tienen una conexión WiFi rápida. ¿Sabes qué le sucede a tu red cuando conectas dispositivos lentos? Pues que su velocidad se reducirá, afectando al resto de conexiones.
En consecuencia, aquellas actividades que requieren un mayor ancho de banda, como jugar en línea, realizar videoconferencias o reproducir películas en streaming también se verán perjudicadas.
Si vives en una casa grande o pretendes crear una amplia red de dispositivos domóticos, quizás deberías descartar la señal WiFi y optar por una conexión más robusta y estable.
Hub de control domótico
El hub domótico, también conocido como gateway o bridge, es un dispositivo que cumple las tareas de concentrar, controlar y monitorizar cada uno de los elementos domóticos instalados en tu Smart Home, haciendo que estos elementos se comuniquen entre si.
Aunque se conecta al router, el hub emite una señal inalámbrica propia, independiente de la red WiFi, que te permitirá liberar al router de la mayoría de las conexiones, que serían inevitables sin este dispositivo.
Para que te hagas una idea: si conectas diez focos inteligentes, un robot aspirador, una cerradura digital y una smart TV a la red WiFi, tu router estará gestionando trece conexiones diferentes.
Si instalas un hub, este pasará a tener el control domótico de todos los aparatos inteligentes. Y el router solo tendrá que gestionar una sola conexión: la del propio hub.
Los hubs domóticos están diseñados y concebidos para concentrar hasta un centenar de dispositivos, ofreciendo un rendimiento mucho más eficiente que cualquier router WiFi.
Además, podrás controlar todos tus dispositivos inteligentes desde una única aplicación, aunque provengan de diferentes fabricantes.
Otra de las grandes ventajas de un hub domótico está relacionada con su cobertura.
Su señal inalámbrica original cubre una distancia similar al WiFi, pero con la particularidad de que los dispositivos inteligentes conectados al hub son capaces de crear una red malla, haciendo crecer su rango de señal mucho más allá de la señal original.
En esta red, cada dispositivo smart conectado se convierte en un nodo emisor de una nueva señal inalámbrica. De esta manera, a medida que añadas nuevos dispositivos, extenderás el radio de cobertura.
Los aparatos inteligentes bajo el control domótico del hub tienen la facultad de comunicarse entre ellos, haciendo posible la configuración de escenas domóticas con un gran número de comandos.
2.- Cerradura inteligente
Además de ser mucho más seguras y confiables que las chapas tradicionales, las cerraduras inteligentes funcionan como un sistema de control de acceso, registrando todas las entradas y salidas que se producen en tu Smart Home.
Al incluir una cerradura inteligente dentro de un sistema domótico, su participación en rutinas programadas te resultará de gran ayuda, al tratarse de un dispositivo que, además de asegurar la puerta de tu casa inteligente, también puede actuar como una suerte de sensor, informando de tu llegada y salida al resto de dispositivos conectados.
Como sugerencia, su desbloqueo podría poner en funcionamiento sistemas de iluminación o calefacción. Y su bloqueo, cuando salgas, activar sistemas de alarma mediante sensores de movimiento. O programas de limpieza que no deseas que se pongan en marcha mientras permaneces en casa, como robots aspiradores.
Cerraduras inteligentes, como la Excel EXC-SP600 o el cerrojo Excel EXC-SD400, tienen conectividad WiFi y pueden integrarse eficientemente en tu sistema domótico.
Si quieres saber más sobre las cerraduras digitales; en esta web encontrarás más artículos a tu disposición para conocer a fondo todo lo relacionado con las cerraduras inteligentes.
3.- Bocina inteligente
Teniendo en cuenta que podemos instalar un asistente de voz en el smartphone, tal vez pienses que una bocina inteligente no es tan necesaria en tu Smart Home.
Sin embargo, la presencia de una o más bocinas inteligentes repartidas estratégicamente por tu casa, te concederá un plus de comodidad y de improvisación, permitiéndote realizar acciones con el simple uso de tu voz.
Ya sea que no tengas el celular a mano, o que estés haciendo otras tareas, como cocinar, tu bocina inteligente siempre permanecerá a la escucha y lista para actuar.
Si la red domótica está creada alrededor de la conexión WiFi, la bocina inteligente será tu mayordomo ideal para ejecutar sencillas órdenes, como apagar y encender luces, reproducir música, noticias, o ajustar el volumen de la televisión.
Si prefieres liberar tu red WiFi, y que los dispositivos utilicen otras conexiones inalámbricas, algunas bocinas inteligentes también incorporan su propio hub domótico ZigBee o Z-Wave.
Una opción interesante son aquellas bocinas inteligentes para el hogar, que están equipadas con sensores en su interior, como de temperatura o de movimiento.
Recuerda que no todos los asistentes de voz funcionan con uno u otro protocolo, así que, antes de comprarte una bocina, asegúrate de que sea compatible con tu sistema domótico.
4.- Foco LED inteligente
Los focos LED para casa han vuelto tremendamente populares en las Smart Home, gracias a la sencillez de su instalación y a un precio bastante asequible.
La posibilidad de jugar con su cromatismo e intensidad te permitirá personalizar diferentes ambientes luminosos para varios momentos del día: ver una película, leer un libro, o una cena romántica.
Los focos LED inteligentes pueden conectarse a la red WiFi y a otros protocolos inalámbricos, como ZigBee, Z-Wave o Bluetooth. Y puedes actuar directamente sobre ellos o integrarlos en escenas domóticas.
Algo que debes tener en cuenta con los focos inteligentes, es que necesitan estar energizados permanentemente para que puedan funcionar de manera remota.
Eso quiere decir que el interruptor mecánico que suministra electricidad al socket debe estar siempre en posición de encendido.
Si, por descuido, apagaras el interruptor de pared, se cortará el suministro eléctrico del foco inteligente, y este no obedecerá ningún comando hasta que vuelvas a poner el interruptor en posición ON.
Para evitarlo, tienes la opción de inhabilitar internamente el interruptor, haciendo que el foco LED siempre reciba electricidad, aunque el interruptor esté en posición de apagado.
El inconveniente de esta opción, ante una falla en la red o en tu sistema domótico, es que corres el riesgo de quedarte con las luces prendidas durante horas o días, si te agarra fuera de casa o de viaje.
5- Apagador inteligente
Los apagadores o interruptores inteligentes cumplen la misma función que los interruptores tradicionales; prendiendo y apagando aquellos focos que están conectados directamente al cableado de la instalación eléctrica de casa.
La gran ventaja de este tipo de interruptores smart es su conectividad, ya que te permite integrarlos en un sistema domótico, pudiendo controlar a distancia los focos que tengas en el hogar, sin importar que sean incandescentes, halógenos, de espiral, fluorescentes, LED, etc.
Como ocurre con cualquier otro dispositivo inteligente, estos interruptores pueden funcionar con una red WiFi, con ZigBee y Z-Wave, o con Bluetooth.
Si bien algunos apagadores inteligentes solo pueden manejarse de forma remota, te recomendamos aquellos modelos híbridos que también tienen pulsadores mecánicos o un panel táctil.
Ante cualquier incidencia con tu conexión a internet, siempre podrás utilizar el apagador inteligente de forma manual.
A diferencia de los focos inteligentes, los interruptores inteligentes controlan el circuito eléctrico, haciendo innecesario la inhabilitación del interruptor.
Y son compatibles con cualquier tipo de foco que ya tengas en casa, por lo que no estarás obligado a reemplazarlos, evitándote un gasto mayor.
6.- Tira LED inteligente
La utilidad de estas tiras es iluminar de manera complementaria algunos rincones y objetos en tu casa inteligente, con la idea de inspirar unos determinados ambientes cromáticos.
Al igual que los focos inteligentes, estas tiras LED ofrecen una variada paleta de colores que podrás ir cambiando, así como su intensidad, en función de las actividades que vayas a realizar.
Las tiras LED inteligentes se conectan a la red WiFi, o al Bluetooth de nuestro celular, y se controlan mediante apps y los principales asistentes de voz. Si la tira cuenta con su propio micrófono, también puede interactuar con sonidos externos como música ambiental, aplausos, etc.
Incluso, puedes encontrar tiras LED inteligentes específicas para ver la televisión. Estas tiras LED incorporan una pequeña cámara y sincronizan su propia iluminación con los colores que se están reproduciendo en la pantalla.
Si tu televisión está montada sobre la pared, la tira LED WiFi proyectará sobre esta un cromatismo dinámico, haciendo que el visionado de película sea una experiencia mucho más inmersiva en el aspecto visual.
Así pues, la tira LED WiFi es una interesante propuesta a la hora de añadir algún tipo de iluminación secundaria en tu Smart Home. Aunque no tendría sentido usarla como fuente de luz principal para iluminar tu hogar, salvo que tu concepto de casa inteligente se asemeje a la cueva de Batman.
7.- Control remoto WiFi
Antes de correr a comprar dispositivos domóticos de manera compulsiva, has de saber que muchos de los aparatos electrónicos que ya tienes en casa pueden convertirse en inteligentes, aunque aparentemente no tengan conectividad alguna.
Una de las mejores soluciones para adaptar tu «vieja» tecnología del siglo pasado a la era del IoT son los controles remotos WiFi. Gracias a estos dispositivos, todos los electrodomésticos que funcionen con un control de infrarrojos tendrán una segunda vida en tu casa inteligente.
El control remoto inteligente tiene conectividad con protocolos inalámbricos e incorpora a tu sistema domótico todo aparato que esté equipado con un sensor de infrarrojos o de radiofrecuencia, como televisores, aparatos de aire acondicionado, ventiladores, equipos de música, toldos motorizados, etcétera.
El emparejamiento de frecuencia con el control remoto WiFi se realiza a través de una app y, una vez completado pasarás a controlar desde tu celular o bocina inteligente el dispositivo emparejado, pudiendo realizar de manera remota y automática cualquier tipo de ajuste, según las funciones de cada electrodoméstico.
8.- Enchufe inteligente
¿Y qué pasa con aquellos aparatos domésticos eléctricos sin conectividad, y que tampoco funcionan con control remoto? Pues parece que la tecnología se ha apiadado de ellos y también los podemos incorporar a nuestro proyecto domótico, por medio de los enchufes inteligentes.
El enchufe inteligente se conecta directamente a una toma de corriente y el dispositivo que queramos controlar lo conectaremos al enchufe inteligente.
A diferencia del control remoto con conectividad, la función del enchufe WiFi es muy básica, pues, simplemente, suministra o interrumpe la corriente eléctrica al aparato conectado.
Igual que sucede con los focos inteligentes, cualquier electrodoméstico conectado a un enchufe inteligente debe estar permanentemente encendido. Si pones su interruptor en posición OFF, ya no podremos hacerlo funcionar mediante el enchufe inteligente.
Pese a que sus opciones parecen muy limitadas, el enchufe WiFi es un dispositivo muy práctico para automatizar aparatos eléctricos de uso cotidiano, como lámparas, radiadores, mantas eléctricas o luces de Navidad, programando horarios y temporizadores.
La mala noticia es que los enchufes inteligentes no son de mucha utilidad con aquellos aparatos eléctricos que tienen una función de ahorro de energía o «stand by». En tal caso, el enchufe inteligente solo podrá apagarlo completamente o volver a ponerlo en modo de espera.
9.- Cortinas inteligentes y persianas WiFi
Tener tus cortinas, persianas y estores automatizados es el paso necesario para que tu sistema domótico controle la iluminación natural de tu casa inteligente.
Con un poco de imaginación, puedes incluir su acción en diferentes rutinas, como oscurecer la sala cuando quieras ver una película. O que funcione como «despertador silencioso», dejando pasar los primeros rayos de sol de la mañana a una determinada hora.
En algunos casos, la instalación de cortinas, persianas y estores WiFi requiere la retirada completa de cualquier sistema que tuviéramos instalado previamente.
Si no quieres comprar cortinas inteligentes, también tienes la opción de automatizar tus cortinas manuales. Puedes encontrar rieles inteligentes o dispositivos motorizados que se desplazan sobre la barra, abriendo y cerrando de manera remota cualquier tipo de cortinas corredizas.